El hombre guarda objetos por distintos motivos. Algunas
personas para clasificarlos u organizarlos, otras porque los necesitan para su
vida cotidiana y hay también quien conserva recuerdos.
Hoy podemos encontrar cajas
llenas de diversos artículos en escuelas, casas , oficinas, archivos y otros
lugares. Y tú, cuántas cajas guardas?
Los inicios...
Egipcios, romanos, chinos y otras culturas antiguas usaban cajas de
madera donde agrupaban , conservaban o transportaban diversos elementos que
podían ser desde objetos de uso cotidiano hasta restos de personas...
Si hablamos de mercancías, una caja se usa para proteger, almacenar
y, en ocasiones, exponer la mercancía en el lugar de venta.
Hoy encontramos cajas grandes, medianas o pequeñas.
De madera,
cartón o plástico. Con tapa o sin ella. Lisas o decoradas.
Guardan ropa, herramientas, documentos, recuerdos de un viaje, del
nacimiento de un bebé, botones, joyas, recibos, etc.
Están las cajas metálicas de seguridad en los bancos y las cajas fuertes.
Coleccionistas
Tengo una amiga que colecciona cajitas de distintos países, bonitas, curiosas, antiguas o modernas.
Hay coleccionistas de cajitas de fósforos, otro prefieren
pastilleros.
Esas cajitas son de distintos materiales que van desde madera hasta
nácar, porcelana o metálicas.
Algunas son tan bonitas que uno quiere conservarlas.
Hace tiempo vi en una quincalla una colección de pastilleros y los compré.
A veces las cajas de fósforos tienen paisajes típicos, monumentos u
otros lugares famosos , como por ejemplo las cubanas. Esas las guardo con cariño porque me traen buenos recuerdos.
Sin contar las cajitas de música...
Eres adicto a guardar cosas?
Puedes
guardar objetos necesarios para la vida diaria o recuerdos.
Generalmente
encontramos cajas en los garajes, sótanos o áticos.
Pero...cuidado! puedes
padecer del síndrome del acaparador compulsivo...
El síndrome de acumulación compulsiva o síndrome de acaparador
compulsivo, o disposofobia es un trastorno psicológico caracterizado por la
tendencia a la acumulación de artículos u objetos en forma excesiva en
referencia a cantidades socialmente aceptadas y la incapacidad para deshacerse
de ellos, incluso si los objetos no tiene valor, son peligrosos o insalubres.
Cajas en Cine y TV
Hay obras de cine donde las cajas ocupan parte importante de la
trama:
"La caja 507" (España, 2002), director: Enrique Urbizu; "Las cajas españolas"
(España, 2004), director: Alberto Porlan. Documental; "Las cajas de Stanley Kubrick"(Reino Unido, 2008) (TV),
director: Jon Ronson. Documental; "7
cajas" (Paraguay, 2012), directores: Juan Carlos Maneglia y Tana Schémbori; "7 Cases" (Reino Unido, 2015), director: Sean J. Vincent
y "Cajas "(España, 2016),
director: Luis Mateos.
Para saber
Desde 1938 Finlandia entrega a las mujeres embarazadas una caja de cartón llamada paquete de
maternidad. Un regalo del gobierno con ropa, sábanas, productos para el baño, pañales,
un colchón pequeño y juguetes que
a su vez puede ser usada como camita.
Al principio era para mujeres de bajos recursos. A partir de
1949 se entrega a todas con la condición que, para obtener la caja, tenían que
visitar a un médico y una clínica pública prenatal antes de los 4 meses de
embarazo . Las madres pueden decidir si tomar la caja o recibir efectivo (unos
US$214), el 95% opta por la caja.
Esta experiencia ha sido replicada en otros países del mundo desde
México al sur de Asia, pasando por Sudáfrica, Reino Unido, Estados Unidos y Canadá.
En Ciudad de México comenzó en agosto 2015 con el nombre "Cunas CDMX" con la idea de llegar
a 10.000 madres. Su objetivo es hacerle un seguimiento a los embarazos de las
personas de menos recursos y atacar el problema de la mortalidad infantil.
La caja incluye 25 artículos para el cuidado y la higiene del recién
nacido como cuna, colchón, sábanas,
cobija, dos mamelucos, gorro, dos pares de calcetines, pañalera, fular para bebé,
un tiraleche con contenedor y un cuadernillo de cuidados.
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Yo tengo unas cuantas latas, de esas de galletas o bombones, llenas de abalorios y la verdad es que a veces me siento agobiada con tanta cosa, pero aún así a veces pico y sigo comprando...
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