El origen de ambas festividades se remonta en los siglos.
Halloween
Los celtas ocupaban parte de Europa, lo que hoy día es Escocia, Irlanda, Inglaterra y Francia. Dentro del calendario celta, el 1 de noviembre marcaba el inicio del año nuevo, lo que significa que el 31 de octubre era la víspera del nuevo año y celebraban esa fecha.
Después de que los romanos conquistaran la mayoría del territorio celta en el año 43 D.C., el emperador Constantino decretó que los habitantes de su imperio se convirtieran al cristianismo y muchas de sus festividades fueron asimiladas.
Después de que los romanos conquistaran la mayoría del territorio celta en el año 43 D.C., el emperador Constantino decretó que los habitantes de su imperio se convirtieran al cristianismo y muchas de sus festividades fueron asimiladas.
Hacia el siglo VIII, la Iglesia Cristiana convirtió el día 1 de noviembre en el día de Todos los Santos para rendir homenaje a todos los santos que no tuvieran un día particular de celebración.
En el siglo IX, el Papa Gregorio IV estableció que el Día de Todos los Santos se celebraría universalmente y que debía realizarse ese día una misa por los muertos.
En el siglo IX, el Papa Gregorio IV estableció que el Día de Todos los Santos se celebraría universalmente y que debía realizarse ese día una misa por los muertos.
La mayoría llamó "All hallowmas" (la misa de todos los santos, de las personas santas) al Día de Todos los Santos.
La noche anterior se conoció como "All Hallows Eve" (Víspera del Día de Todos los Santos).
La noche anterior se conoció como "All Hallows Eve" (Víspera del Día de Todos los Santos).
Hacia el año 1845, Irlanda experimentó su peor crisis económica y social, millones de irlandeses emigraron a otros países en busca de trabajo, Estados Unidos fue el principal destino de los exiliados.
Los irlandeses llevaron sus tradiciones, y así fue como All Hallows Eve se convirtió en Halloween.
Los irlandeses llevaron sus tradiciones, y así fue como All Hallows Eve se convirtió en Halloween.
Costumbres de Halloween
La costumbre de ahuecar y tallar una calabaza para convertirla en un farol llamado Jack-o-lantern tiene su origen en el folklore irlandés del siglo XVIII,.
El farol no tenía como objetivo convocar espíritus malignos sino mantenerlos alejados de las personas y sus hogares.
El farol no tenía como objetivo convocar espíritus malignos sino mantenerlos alejados de las personas y sus hogares.
La costumbre de pedir dulces de puerta en puerta (trick-or-treating) se popularizó alrededor de 1930 en Estados Unidos.
Día de Muertos
El Día de Muertos es una celebración mexicana de origen prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre.
Comienza el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos.
Comienza el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos.
Cuando llegaron a América los españoles en el siglo XVI trajeron sus propias celebraciones cristianas y europeas, donde se recordaba a los muertos en el Día de Todos los Santos.
Al convertir a los nativos del nuevo mundo se dio lugar un sincretismo que mezcló las tradiciones europeas y prehispánicas, haciendo coincidir las festividades católicas del Día de todos los Santos y Todas las Almas con el festival similar mesoamericano, creando el actual Día de Muertos.
Al convertir a los nativos del nuevo mundo se dio lugar un sincretismo que mezcló las tradiciones europeas y prehispánicas, haciendo coincidir las festividades católicas del Día de todos los Santos y Todas las Almas con el festival similar mesoamericano, creando el actual Día de Muertos.
Son elementos imprescindibles de Día de Muertos:
Las Calaveritas o rimas (epitafios humorísticos de personas aún vivas que constan de versos donde la muerte (personificada) bromea con personajes de la vida real (haciendo alusión sobre alguna característica peculiar de la persona en cuestión)
Las calaveritas de dulce (dulces en forma de cráneo) generalmente realizadas de dulce de azúcar, chocolate, amaranto, gomita, entre otros que son vendidas en los tradicionales mercados denominados "Todos Santos" además de tiendas comerciales, tianguis, etc.)
El pan de muerto (panecillo dulce que se hornea en diferentes figuras, desde simples formas redondas hasta cráneos) adornado con figuras del mismo pan en forma de hueso y se espolvorea con azúcar
Las flores de Cempaxóchitl, las cuales se cree atraen y guían las almas de los muertos
El papel picado y los altares de muertos.
Las Calaveritas o rimas (epitafios humorísticos de personas aún vivas que constan de versos donde la muerte (personificada) bromea con personajes de la vida real (haciendo alusión sobre alguna característica peculiar de la persona en cuestión)
Las calaveritas de dulce (dulces en forma de cráneo) generalmente realizadas de dulce de azúcar, chocolate, amaranto, gomita, entre otros que son vendidas en los tradicionales mercados denominados "Todos Santos" además de tiendas comerciales, tianguis, etc.)
El pan de muerto (panecillo dulce que se hornea en diferentes figuras, desde simples formas redondas hasta cráneos) adornado con figuras del mismo pan en forma de hueso y se espolvorea con azúcar
Las flores de Cempaxóchitl, las cuales se cree atraen y guían las almas de los muertos
El papel picado y los altares de muertos.
El 7 de noviembre de 2003 la UNESCO distinguió a la festividad indígena de Día de Muertos como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Por considerar la UNESCO que esta festividad es: "...una de las representaciones más relevantes del patrimonio vivo de México y del mundo, y como una de las expresiones culturales más antiguas y de mayor fuerza entre los grupos indígenas del país."
Por considerar la UNESCO que esta festividad es: "...una de las representaciones más relevantes del patrimonio vivo de México y del mundo, y como una de las expresiones culturales más antiguas y de mayor fuerza entre los grupos indígenas del país."
Halloween en México
La influencia de los Estados Unidos en el panorama actual mexicano en cuanto a gustos, modas y costumbres se evidencia con la presencia de Halloween, la cual se celebra cada año con más frecuencia y en un mayor número de hogares.
Niños disfrazados de vaqueros, indios, calabazas, piratas, princesas, hombre araña y otros personajes, visitan a sus vecinos en las colonias pidiendo los tradicionales caramelos.
En tiendas y supermercados se hace una gran propaganda facilitando la compra de disfraces típicos de esa festividad así como faroles tipo calabazas, mascaras, antifaces y todo lo necesario para ese día.
En tiendas y supermercados se hace una gran propaganda facilitando la compra de disfraces típicos de esa festividad así como faroles tipo calabazas, mascaras, antifaces y todo lo necesario para ese día.
Sin embargo, la tradición del Día de Muertos es mucho más fuerte y todos los mexicanos se involucran en ella, las familias visitan a sus familiares fallecidos en los cementerios, se hacen altares de muerto en casas, escuelas y centros de trabajo y muchos van a misa en iglesias desbordadas de fieles.
Como cubana, ambas festividades, Halloween y Día de Muertos, llaman poderosamente mi atención. He podido verlas tanto en Estados Unidos como en México y ambas, con sus características propias, me gustan mucho.
En Cuba actualmente, el Día de los Fieles Difuntos es celebrado por los católicos que van al cementerio y llevan flores a sus muertos y en las iglesias donde asisten a misa.
Temas Relacionados:
