El Expiatorio

El Expiatorio, nombre con el que se conoce el Templo del Santísimo Sacramento fue diseñado por el Arquitecto Adamo Boari  quien también hizo el Teatro de Bellas Artes y el Correo Mayor en la capital. Su construcción comenzó el 15 de agosto de 1897 y terminó 75 años después en 1972. El templo está hecho mayormente por piedra tallada tal y como se hacía en la Edad Media.

Abierto al culto el 6 de enero de  1931, es de estilo Neogótico y está considerado como la máxima obra en su estilo en México.

El reloj de El Expiatorio

Posee una fachada de piedra cantera impresionante rematada a lo alto con un reloj hecho en Alemania de cuatro carátulas iluminadas junto con un carrillón de 25 campanas que tocan una colección de obras musicales tanto religiosas como populares; dicho carrillón puede ser tocado por un teclado que está en el coro, este reloj costó aproximadamente 450 mil pesos y fue instalado por técnicos alemanes.

Al sonar alguna pieza musical, lo acompaña la peregrinación de las figuras de los doce apóstoles que originalmente se fijaron a las 9 am, 12 pm y 6 pm.

De las 25 piezas musicales que contiene el carrillón sólo nombraré algunas: Ave María, Himno Nacional, Las Mañanitas, Guadalajara, Adiós Mariquita Linda, Las Golondrinas, México Lindo y Querido, la Marcha de Zacatecas, etc.

Breve descripción del templo

Las puertas del templo son de madera con figuras de bronce incrustadas hechas por Benito Castañeda y  los tres tímpanos del frente de la iglesia son de mosaicos italianos realizados en la fábrica de mosaicos del Vaticano.
En su interior, la nave central es larga y profunda, en ella  se observan anchas y altas columnas de piedra cantera   y bellísimos vitrales franceses por donde pasan los rayos  del sol. Su cúpula es en forma de pirámide octagonal. Tiene una capilla lateral donde se dan también misas y un patio interior donde abundan las esculturas y gárgolas.

Hay  en su sótano  una sala impresionante llena de nichos donde se guardan los restos de personas importantes de la época de su fundación.

Por su estilo de construcción, vitrales y elegancia,  El Expiatorio es uno de los lugares  preferidos  por las  parejas de enamorados  para realizar su boda.

La Plaza frente al Expiatorio
Al salir del Expiatorio oímos a lo lejos, una voz cantando canciones de los trovadores cubanos Silvio Rodríguez y Pablo Milanés. Salía   desde el balcón de una cafetería que se encuentra justo frente a la iglesia, lugar muy agradable donde se disfruta de un bello panorama, tranquilidad y muchas ofertas de platos tanto mexicanos como internacionales.

La plaza frente al Expiatorio tiene una monumental fuente donde corre constantemente el agua. Tiene además un módulo de información al turista,  las placas de constancia de su inauguración y al frente del templo  hay una  breve descripción de El Expiatorio. Cuenta con Internet  como parte del programa GDL Libre. En la parte subterránea existe un estacionamiento muy amplio.

En ella se realizan  a menudo  actividades culturales y presentaciones de Danzón de manera permanente. Está rodeada de cafeterías y restaurants.

Esta plaza  es un tradicional punto de reunión para cientos de tapatíos durante los fines de semana.

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