La música está
directamente conectada a nuestras emociones y escucharla, forma parte de la lista de las diez cosas que
a la gente le parecen más placenteras.
En tiempos de
coronavirus la música se hace más presente en nuestras vidas, nos acompaña para
entretenernos, hacer ejercicios, meditar o hacer home office.
La música ha existido en todas las culturas desde la prehistoria
involucrando el canto y el baile.
En Babilonia se encontró una de las primeras canciones de cuna de las que
se tiene constancia. Fechada alrededor
del año 2000AC., se encuentra grabada en una pequeña tabla de barro que cabe en
la palma de la mano.
En la antigua Grecia, la música era interpretada como una fuerza que
influenciaba el pensamiento, las emociones y la salud física. En el siglo XVIII
aparecen los primeros artículos sobre los efectos de la música en diferentes
enfermedades.
El 21 de noviembre de 1877 el inventor estadounidense Thomas Edison creó el fonógrafo, primera máquina capaz de grabar y reproducir sonido.
Luego llegaron el tocadiscos, la grabadora, el walkman, los CD, el MP3 y el iPod.
Con el nacimiento de un nuevo modelo, el "streaming", que permite la reproducción de una canción en línea sin necesidad de que sea comprada por el usuario, surgieron plataformas que se han posicionado bien como Spotify, Pandora y Deezer.
Música en época
de COVID-19
La música para mucha gente es algo necesario, relajante, que los ayuda a transportarse en tiempo y espacio a emociones positivas del pasado o a motivarse para hacer ejercicios.
Ante la imposibilidad de asistir a conciertos en vivo, tienen la opción de disfrutar de conciertos virtuales donde ven a sus artistas favoritos, una forma sana de entretenimiento que se puede compartir con la familia lo que hace más llevadera la cuarentena en estos momentos de incertidumbre
La mayoría se entera de los conciertos online a través
de las redes sociales o por You Tube
Beneficios de Escuchar Música
- Al escuchar música por lo menos 15 minutos el cerebro libera dopamina, un neurotransmisor que aumenta los sentimientos de felicidad, emoción y alegría.
- Disminuye el estrés mientras aumenta la salud general
- Escuchar música clásica o relajante una hora antes de acostarse mejora el sueño
- Fortalece el aprendizaje y la
memoria
- Algunas investigaciones científicas
indican que tras una cirugía, los pacientes se pueden mejorar más rápido si se
les permite escuchar la música que les gusta.
Para saber
- Reconocemos con mayor rapidez las canciones de la adolescencia y la temprana adultez que las que se corresponden con cualquier otro momento de la vida y somos más proclives a incluirlas en nuestra lista de temas favoritos. Canciones que están asociadas con momentos, lugares y personas importantes.
- Los estímulos sonoros y musicales nos afectan en toda nuestra integridad: físicamente, emocionalmente, cognitivamente y hasta espiritualmente
La AMTA (Asociación de Musicoterapia Americana), define la musicoterapia como el uso controlado de la música con el objeto de restaurar, mantener e incrementar la salud mental o física. Se usa en el tratamiento de problemas neurológicos como Alzheimer, Parkinson, y traumatismo de cráneo, en autismo, enfermos psiquiátricos, niños con problemas de conducta, personas con SIDA, etc.
En los adultos mayores los tratamientos con música se enfocan en estimulación sensorial, orientación a la realidad, remotivación y reminiscencias.
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